La iluminación de monumentos permite destacar y poner en valor mediante luz y color tanto el patrimonio como las obras arquitectónicas y escultóricas relevantes.
Por ejemplo, bañar de luz una fachada pública realza su volumen ofreciendo un impacto visual distinto al de la luz solar.
O bien el alumbrado de elementos arquitectónicos, que ofrece una visión espectacular de los mismos al realzar su volumen.
O la iluminación de monumentos, que los dota de un volumen y espectacularidad que no tienen a la luz del día.
Una buena iluminación decorativa depende en gran medida de la elección de la luminaria adecuada.
Veamos varias de las características a tener en cuenta:
Materiales constructivos.
La pureza del aluminio utilizado para la construcción de la luminaria garantiza la durabilidad de la luminaria.
Detalles como el prensaestopa de acero inoxidable resistente al polvo y al agua son claves para garantizar la vida útil de la luminaria.
Así como la cubierta de estalinita que además de su gran dureza es resistente al frío y el calor.
Unidad lumínica.
La unidad lumínica está compuesta por diodos led de alto rendimiento con colores brillantes y bajo consumo.
Además, sus lentes ópticas proporcionan alta transmisión de luz con amplio ángulo de emisión.
Control remoto.
La transmisión y sincronización de la señal de control se puede realizar mediante el mando a distancia o mediante aplicación móvil.
De forma que las luminarias se comunican entre ellas mediante una sencilla interface.
Las luminarias Galaxy disponen de 16 millones de colores RGB con control de la temperatura de color CCT lo que proporciona la iluminación deseada para cada situación.
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